En serio.
Tu puedes aprender, tener, o ser lo que sea si quieres pagar el precio.
Tu puedes ser un millonario en un período de tiempo no muy largo.
Tu puedes ser un reconocido experto en cualquier tema.
Tu puedes ser un exitoso dueño de negocios.
Tu puedes tener un entendimiento espiritual profundo.
Tu puedes hacer un triatlón Iron Man.
Tu puedes ser una persona empática, atenta y amorosa.
Tu puedes tener relaciones significativas y bellas con tu pareja romántica, colegas de negocios, mentores, y otra gente que te inspire.
Tu puedes ser la persona que bien sabes dentro de ti que puedes ser.
Tu puedes vivir la vida que tu sabes dentro de ti mismo debes vivir.
Pero debes pagar el precio.
Tienes que tomar una decisión ya.
Si tratas de estar en todos lados, terminarás en ningún lado. Si tratas de ser de todo, terminarás siendo nadie.
Tienes que escoger lo que quieres hacer y quien quieres ser.
Tienes que dejar ir los muchos triviales por los pocos esenciales
Tienes que dejar ir las interminables buenas opciones por las pocas mejores.
Tienes que administrar tu mente y tu tiempo.
No puedes continuar justificándote el vivir por debajo de tus sueños.
Tienes que quererlo de verdad. Porque una vez que lo hagas, nada te podrá parar para tenerlo.
Debes dejar ir tus malos hábitos.
Debes reacomodar tus prioridades.
Tienes que decir “No” mas veces.
Necesitas poner las cosas importantes primero, cada día.
Tienes que pagar el precio.
Si estas dispuesto a pagar el precio, puedes tener absolutamente todo lo que quieras.
Pero necesitas estar lo suficientemente incómodo con tu situación actual para escaparte de las redes sociales. Parar de consumir y desperdiciar tu tiempo.
Enfocarte en aprender y crear mas que en estar entretenido y distraído.
Probablemente tienes docenas de actividades en tu vida que haces diariamente y que no te están sirviendo.
Debes parar esas actividades en tu vida. Déjalas en tu pasado y llena tu futuro con las actividades que te llevarán a donde realmente quieres ir.
Cuando tienes 5 minutos extra, ¿que es lo que haces? ¿Te entretienes y distraes? ¿o pagas el precio?
Cuando tu alarma suena en la mañana, ¿presionas el botón posponer o pagas el precio?
Cuando sabes que debes estar creando, ¿te distraes a ti mismo o pagas el precio?
Cuando estás con tus seres queridos, ¿Miras a tu smartphone o pagas el precio?
¿Eres serio o estas pretendiendo?
¿Realmente lo quieres o todavía no estas seguro?
¿Estás moviéndote un paso en 20 direcciones o 20 pasos en una dirección?
¿Cuantas horas desperdiciaste hoy? ¿Cuantas horas estuviste pagando el precio?
¿Que es lo que quieres realmente?
¿Quieres pagar el precio?
Nada en la vida es gratis, especialmente tu tiempo. Todo tiene un costo. Y cuando se trata de tu tiempo, el costo es enorme. Nunca podrás recuperar un solo segundo de tu vida.
Puedes vivir tu vida con propósito. Puedes pasar tu tiempo en cosas que valoras. Puedes ser quien pretendiste llegar a ser. Puedes continuar progresando y evolucionando, aun después de que te llegues a ser exitoso y pleno.
Pero el precio debe ser pagado.
No lo puedes fingir.
Está disponible si lo quieres. Pero debes elegirlo.